martes, 20 de noviembre de 2012

El ave de los mil rostros.





Pollo estilo Pátzcuaro.
El pollo es uno de los alimentos más comunes en la comida mexicana; se vende rostizado por todo el país, es guisado de mil formas en los hogares, es ingrediente insuperable para enchiladas, tacos y chilaquiles e incluso alcanza grandes ventas preparado al estilo Kentucky. Es una carne económica y también ligera o amigable para el sistema digestivo. Recuerdo que mi abuela lo consumía bastante, cada vez que preguntaba lo que comía o iba a comer me contestaba “pollito hijo, pollito”.  Se  puede preparar de muchas formas y seguramente complace todo tipo de gustos, desde el sano pollo hervido hasta las alitas picantes. Hace poco tuve oportunidad de conocer una nueva forma de prepararlo y comerlo, al estilo Pátzcuaro. No lo probé en Michoacán sino en la ciudad de Querétaro, en un establecimiento que se encuentra en la prolongación de la avenida 5 de febrero o bulevar de la Nación, como ahora le llaman. El lugar es algo rústico y tiene tanto mesas para ahí consumir sus productos, como vende paquetes para llevara a domicilio. El pollo se cocina frente a brasas, colocado sobre unas largas varas de madera. Me imagino que su cocimiento es muy lento. Por único condimento lleva el jugo de naranjas agrias (que antes asociaba sólo a la comida yucateca), sal y pimienta. Ya listo, su sabor es muy diferente al de otras preparaciones más conocidas o tradicionales. Tiene un aroma y sabor a naranja, pero ambos son muy sutiles y no saturan los sentidos, nada salado y hasta un poco dulce. Tiene también en su interior un color extremadamente blanco, aun ya bien cocido, es suave y por supuesto delicioso.  En el Restaurante Campestre El Pastor venden también borrego, cabrito, costillas de cerdo, lechón, chamorro, pavo, codorniz y chorizo, incluso corundas, pero la especialidad es el pollo al pastor. Tienen también en el lugar magníficas salsas de un sabor y color extraordinarios. El precio del pollo es módico, el lugar muy limpio, el servicio bueno y se puede almorzar o comer. Dejemos Kentucky y viajemos desde Querétaro a tierra purépecha a través de su pollo.